La cuarentena​ y el retiro obligado de lo público a lo privado nos da la oportunidad de conectar con nuestra casa, y todo lo que ella representa en nuestras vidas. Te invitamos a descubrir cómo en esta cuarentena, el Feng Shui puede ser un gran aliado en tu hogar.

Hoy nos toca quedarnos en casa con el tiempo suficiente para reencontrarnos con ella, sentirla y mirarla con ojos diferentes a los de la vertiginosa rutina. La casa posee toda nuestra información personal y familiar: en cada uno de sus rincones están expresados nuestros hábitos, emociones, mandatos acumulados de años e incluso de generaciones anteriores.

Encontrar el equilibrio dentro de nuestros hogares es casi un desafío atípico en la sociedad en que vivimos (y mucho más aún, en el contexto actual), pero pensemos la casa como nuestra aliada, es nuestro hábitat, el reflejo de nuestro interior más profundo e inconsciente.

Desde el punto de vista del Feng Shui, las siguientes acciones ayudarán a realizar varios ajustes energéticos beneficiosos.

Las ventajas son varias, principalmente, desprenderse de apegos innecesarios, jerarquizar objetivos y proyectos, hacer espacio a energía renovada y limpia, y estar más cómodos y mejor organizados en el día a día.

1. El closet

Es el momento de poner en circulación lo que hace años no usas, o esa prenda que ya no representa tu presente. En la ropa que no usamos se acumula y estanca el Qi, lo mejor es que alguien la aproveche y te quede más espacio en el closet.

2. Los papeles

Algo que fácilmente se acumula y representa muchos temas postergados en nuestra vida, así como una necesidad de control exagerada. Un buen plan es quedarse estrictamente con los necesarios y guardarlos, clasificados en cajas o carpetas. Esto organiza la energía y clarifica la mente.

3. Elementos de cocina

Es increíble cómo se acumulan cubiertos, platos, tápers y otros utensilios de cocina que poco usamos o están duplicados, o en mal estado. Esto corrompe el Qi de la cocina, ambiente que para el Feng Shui representa la productividad y la nutrición del hogar. Idealmente nada de esto debería quedar a la vista, sino guardado en cajones y alacenas.

4. Las plantas

Ahora que tienes más tiempo, dedicate a engreirlas: ellas son nuestras aliadas en el hogar, porque si están sanas, además de aportar belleza, irradian una energía que ayuda a balancear los desequilibrios, y aportan Qi Yang allí donde está deprimido.

5. El Flujo Energético

Revisa la circulación de la energía en la casa, en la sala y dormitorios, en la cocina y baños. Si hay muebles que impiden o dificultan el paso, si hay muchos objetos acumulados, prueba una nueva distribución espacial para ayudar a que la energía fluya suave y sin obstáculos.

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6. La Decoración

Una vez que hayas limpiado y organizado la casa, puedes avanzar hacia un nivel más profundo de conexión con tu hogar. Observa las imágenes y adornos, los colores, la distribución de los muebles. ¿Hay cosas rotas, deterioradas o imágenes tristes o agresivas? Es ideal retirarlas, en estos casos, más que nunca, menos es más. Hay que recordar que la energía cobra la forma de los objetos y lugares por los que transita. Por eso, objetos desequilibrados en su silueta, como ser esculturas mutiladas, imágenes de guerreros, lanzas, máscaras, elementos punzantes, transmiten energía negativa y hay que evitarlos.

También los cuadros que envían mensajes de confusión, sufrimiento, agresividad o angustia se deben reemplazar por imágenes que irradien armonía, serenidad, abundancia, alegría y amor. Si tienes fotografías muy antiguas, cámbialas por imágenes actuales y alegres de tus seres queridos, quédate en este presente y vívelo con creatividad.

Recuerda que todo lo que se expresa en la casa crea afirmaciones ambientales que refuerzan tu subconsciente.

7. Reparaciones Pendientes

Arreglar manillas sueltas, llaves que pierden agua, sacar la humedad, incluso puedes animarte a pintar si tienes los elementos en casa, reparar algún mueble, o lavar las cortinas son acciones muy significativas para el Feng Shui. Ya que las averías en la vivienda simbolizan desbalances energéticos en diferentes aspiraciones vitales de una persona o grupo familiar. Es el momento de ocuparte de ellas.

8. Aromas y sonidos

Son los intangibles de la casa, pero realmente su influencia es poderosa. Los olores influyen en el estado de ánimo, pueden ser relajantes o estimulantes, pero también molestos. Una atmósfera limpia y con olor agradable, que conecte con el aire puro de la naturaleza, hace cualquier estadía mucho más positiva. Prefiere siempre las fragancias naturales provenientes de frutas, especias, extractos de vegetales a las artificiales e intensas.

En cuanto a los sonidos, los días de extremo silencio ambiental provocan que algunas personas se sientan incómodas o solitarias. Esta experiencia puede resultar muy Yin para los habitantes urbanos que recurren entonces al constante parloteo de la TV para aminorar la sensación de vacío.

Es positivo en estos momentos, desconectarse a ratos de las noticias, y activar el interior de tu casa con momentos de música alegre, y otros con sonidos de la naturaleza (grabaciones de cascadas de agua, canto de pájaros, olas, lluvia).

Es un tiempo de creatividad, siempre hay algo nuevo para aprender en casa, aprovecha de cocinar algo rico con tus hijos o pareja, estudiar online algo que hayas postergado, llamar a amigos o familia que hace tiempo no ves, llena de amor el espacio que habitas. Ahora ya sabes cómo en esta cuarentena, el Feng Shui puede ser un gran aliado en tu hogar.

Fuente: Patricia Traversa autora del libro “Cambie su vida con Feng Shui”.

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